Alcides Velásquez tiene 27 años y es barrendero. Mientras cumplía su labor, escuchó los gritos de una mujer porque su hijo estaba con convulsiones. No lo dudó: le hizo maniobras de RCP y junto a otro vecino lo llevaron al hospital.
Un barrendero de Pilar le salvó la vida a un nene de dos años que estaba convulsionando en plena calle, tras practicarle maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) y llevarlo inmediatamente al hospital más cercano. Se trata de Alcides Velásquez, de 27 años, quien parece haber sido puesto en la zona por el destino, ya que estaba trabajando allí en un horario poco habitual para él.
Velásquez recorre el barrio Villa Morra de esa localidad del norte del Conurbano bonaerense y, según contó, pasa por el lugar del hecho alrededor de las 6 de la mañana. Sin embargo, ayer circulaba por calle Las Heras, entre 9 de Julio y Sanguinetti a las 9.30. Incluso, antes de encontrarse al chico, había vuelto porque se olvidó un elemento de trabajo.
En ese momento, escuchó gritos y vio a una mujer que salía corriendo de su casa con el bebé en brazos, para luego apoyarlo en el suelo e intentar reanimarlo. “Lo vi, ya estaba moradito, entonces le metí el dedo en la boca, le saqué la lengua para que no se ahogue y le hice masajes en el pecho”, contó el trabajador en diálogo con el portal Pilar a Diario.
Y resaltó: “Corrí buscando algún auto que frenara y justo salía una camioneta Hilux de un vecino que me dijo ‘vamos que te llevo’. El hombre se llama Roberto, que fue muy amable y estuvo preocupado por el nene, que llegó al hospital enseguida”.
El centro de salud elegido fue el más cercano, el hospital Juan Sanguinetti, en el centro pilarense. “Llegamos a los gritos, entramos una sala y lo empezaron a atender y a mí me sacaron, pero con Roberto, nos quedamos en la puerta escuchando qué pasaba y cuando lo escuchamos llorar respiramos aliviados”, expresó el barrendero.
Ante la consulta del médico sobre si sabía realizar RCP, el héroe se sinceró: “No, sólo lo que siempre vi por televisión, la verdad es que hice lo que me salió”. El profesional le respondió que sin esa intervención, el nene no hubiera sobrevivido.
Cuando la madre llegó al nosocomio, Velásquez siguió con su trabajo y regresó por la tarde al Sanguinetti. “Me encontré con la noticia de que le habían dado el alta, así que me fui hasta la casa y la mamá me dijo que estaba bien. Así que me fui tranquilo a mi casa”, cerró el hombre.
En tanto, la empresa en la que trabaja destacó mediante un comunicado: “Una vez más queda demostrado que no todos los héroes nacen con capa y que gracias al gesto noble, estoico y heroico de nuestro trabajador se logran enaltecer los valores de asistencia, compañerismo, humildad que conforman a nuestros trabajadores”.
“No queremos dejar pasar inadvertido dicho suceso y otorgarle un reconocimiento hacia semejante acción humanitaria por parte de nuestra empresa”, valoraron desde la compañía.
