El deportista que juega en un equipo polaco de primera división fue puesto bajo custodia en la región meridional polaca de Silesia, dijeron los fiscales en un comunicado. El jugador y su elenco no fueron identificados públicamente, mientras que los fiscales dijeron que había llegado a Polonia en octubre de 2021.
Polonia, un centro clave para los suministros militares occidentales a Ucrania, dice que se convirtió en un objetivo importante para los espías rusos y acusa a Moscú de tratar de desestabilizar el país.
«¡Los espías rusos están cayendo uno a uno!», escribió en Twitter el ministro de Justicia, Zbigniew Ziobro y añadió: «Se ha capturado a un espía que actuaba bajo la apariencia de un atleta.
El ruso era jugador de un club de primera división.».
Según los fiscales, el detenido llevó a cabo actividades que incluían la identificación de infraestructuras críticas, por las que recibió un pago. Permanecerá en prisión preventiva y podría enfrentarse a una pena de hasta 10 años de cárcel.
La embajada rusa en Varsovia dijo por correo electrónico que «no hace comentarios sobre estos temas».
En marzo, Polonia informó de que había desarticulado una red de espionaje rusa que operaba en el país y detenido a nueve personas que, según dijo, preparaban actos de sabotaje y vigilaban las rutas ferroviarias hacia Ucrania.
En abril, anunciaron que iban a introducir una zona de exclusión temporal de 200 metros alrededor de su terminal de gas natural licuado (GNL) de Swinoujscie, alegando preocupación por el espionaje ruso.
