Desde Casa Militar aclararon a la agencia Noticias Argentinas que se trata de una medida preventiva de seguridad ante la posibilidad de que la protesta en repudio por el fallecimiento de Facundo Molares se extienda hasta la Plaza de Mayo.
La protección se enmarca ante la ola de indignación surgida en los movimientos sociales y partidos de Izquierda luego de que Molares, ex integrante de las FARC, murió en contexto de un fuerte operativo policial presente en una movilización convocada en el Obelisco «contra la farsa electoral y por la democracia del pueblo», según precisaron los organizadores.
Tras una jornada de protestas que dejó el saldo de seis detenidos, desde Unidad Piquetera llamaron a marchar hoy a las 10 desde el Obelisco para exigir Justicia por el fotoperiodista. Si bien aún el recorrido de la movilización no está definido, sus convocantes no descartan trasladarse a la Plaza de Mayo, lo que generó la reacción preventiva del organismo encargado de velar por la seguridad del presidente Alberto Fernández.
Según supo NA, también se reforzó el número de operativos de seguridad de Casa Rosada que permanece en total hermetismo respecto a los violentos episodios de los últimos días.
A pesar de que el penoso incidente ocurrió en horas de la tarde del jueves, no hubo ningún funcionario de Gobierno que se hiciera eco de lo sucedido.
Tal como contó NA, el Gobierno destina casi 250 millones de pesos en el alquiler de vallas de que son utilizados tanto para los actos oficiales como para la seguridad en los accesos.
La Secretaría General de la Presidencia abrió una licitación para contratar hasta fin de año módulos de vallas metálicas «destinadas a los distintos eventos a realizarse en todo el país donde se presente el primer mandatario, su familia y funcionarios».
