La líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala, rechazó hoy la condena en su contra en una causa iniciada por el radical Gerardo Morales en 2009 y cuestionó la relación de la Justicia de Jujuy con el gobernador provincial, al tiempo que reclamó más control de parte del Gobierno Nacional.
En diálogo con el programa «Caballero de día», que conduce Roberto Caballero por La990, Sala señaló: «Yo no estuve en ese escrache, el único testigo que tiene Gerardo Morales hoy es funcionario de él». La dirigente social se refirió a la condena de tres años y seis meses de prisión de cumplimiento efectivo, acusada por el escrache que sufrió en 2009 el actual gobernador de Jujuy, Gerardo Morales.
Sala actualmente cumple arresto domiciliario por daños en el marco de una pena de tres años, pero la Cámara de Casación ordenó en 2017 revisar el fallo y dictar un nuevo veredicto, agregando el delito de amenazas.
El fallo que impuso la nueva pena fue dictado por el tribunal oral federal de Jujuy integrado por los jueces Alejandra Cataldi, Héctor Juárez Almaraz y Liliana Snopek.
«Sigo padeciendo injusticias y esa es mi indignación, porque no reaccionan» en el oficialismo, consideró la dirigente social.
Decepcionada de la actitud del Gobierno Nacional, le pidió al Poder Ejecutivo que vaya «a Jujuy y vea todos los atropellos que están sucediendo con los opositores».
«Jujuy está horrible y pareciera que no es parte del gobierno nacional, es un gobierno dictatorial», resaltó Milagro Sala.
«Así es Gerardo Morales. Todos los que hablan bien de Milagro Sala quedan detenidos, todos los que hablan mal son premiados», remarcó.
Advirtió, en tanto, que «en Jujuy se vive pinchaduras de teléfonos, persecuciones y los que no denuncian a Gerardo Morales son los únicos que están bien».
«Donde uno toque en Jujuy, hay negocios de Rivarola y de Morales y nadie puede hablar mal de ellos», se quejó la líder de la Tupac Amaru.
Y agregó: «En Jujuy están haciendo un desastre, el virus avanzó muchísimo, desde que abrieron las escuelas fallecieron 29 docentes».
