El funcionario comentó que la operatoria «está muy enfocada en los bonos globales, sobre todo los de vencimiento en 2029 y 2030», a la vez que añadió: «Entendemos que es ahí donde hay que atacar para la mejor administración de la deuda».
Massa encomendó al Banco Central, «para la mayor transparencia de la operación», que en nombre del Tesoro lleve adelante el proceso de recompra «para seguir mejorando el perfil de deuda externa, para seguir bajando el riesgo país y así mejorar las posibilidades del Estado y de las empresas de acceder al mercado de capitales».
El jefe del Palacio de Hacienda se expresó así en el marco de un breve mensaje que brindó desde esa cartera, a través del cual invitó al sector privado a que tome una medida similar con sus pasivos.
Además, garantizó acerca de los próximos meses: «Llevaremos adelante otras medidas como la que estamos tomando ahora» para, según destacó, «devolver a la Argentina a un lugar de participación en el mercado de capitales».
En este marco, Massa consideró que para 2023: «Algunas proyecciones que teníamos se han visto modificadas, como las que tienen que ver con inclemencias climáticas y con el crecimiento de valor de productos de exportación o menores niveles de importaciones».
Sobre este último punto, dijo que habrá menores niveles de importaciones de energía que lo que está proyectado en el Presupuesto de este año.
Además, indicó que el orden fiscal «tiene muy asociado la administración de pasivos», mientras que agregó: «Y en 2022 hicimos un trabajo muy fuerte de una mejora en el perfil de vencimiento de de la deuda en pesos. En paralelo, vimos una caída de unos mil puntos en el riesgo país de la Argentina. Y eso significa una ventana de oportunidad para el país».
«Por eso tomamos la decisión de llevar un proceso de recompra de la deuda externa argentina por más de US$1.000 millones», resaltó.
MASSA ANUNCIÓ EL INICIO DE UN PROCESO DE RECOMPRA DE LA DEUDA EXTERNA ARGENTINA POR MÁS DE US$1.000 MILLONES
El ministro de Economía, Sergio Massa, anunció que este miércoles se inicia un proceso de recompra de la deuda externa argentina por más de US$1.000 millones, con el objetivo de "devolver a al país a un lugar de participación en el mercado de capitales".