El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, recibirá hoy al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, para «avanzar en los detalles» de la próxima etapa de la cuarentena a partir del 17 de agosto.
En ese marco, las mismas fuentes indicaron que durante la reunión se analizarán «los datos epidemiológicos» del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), con el propósito de «definir si hay posibilidades de realizar alguna nueva flexibilización». La charla de mañana se realizará para que puedan «consensuar cómo seguir en la nueva etapa de la cuarentena», la cual sería anunciada el próximo viernes por el presidente Alberto Fernández en la Residencia de Olivos.
Según detallaron fuentes de ambos distritos, Rodríguez Larreta y Kicillof buscarán «criterios comunes» para presentárselos al jefe de Estado en una nueva reunión que compartirán los tres el próximo jueves en la Quinta Presidencial.
«Es complejo pensar en la vuelta atrás, en todo caso hay que ver con qué mecanismos. Si siguen aumentando los casos, el sistema se satura», resaltaron. Afirmaron que «hay que reforzar los controles», pero aclararon que «en muchos casos depende directamente de los municipios no del Gobierno bonaerense».
Kicillof y Rodríguez Larreta se reunirán en medio de las diferencias que varios integrantes del Gobierno bonaerense marcaron con la administración porteña. Una de las encargadas de fijar la posición del Ejecutivo bonaerense fue la ministra de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, Teresa García, quien aseguró hoy que es «inadmisible» la habilitación del golf, y aclaró que esa actividad «no está en la agenda» de Kicillof.
«Si vemos que no alcanza lo que pudimos hacer en estos meses se tomará la decisión de cuarentena estricta. Si los números lo indican habrá que volver a una cuarentena estricta. No digo que vayamos a hacerlo, hay que ver los números del día a día», sentenció García en declaraciones radiales.
El pasado lunes, Rodríguez Larreta ya se reunió con Alberto Fernández en la Residencia de Olivos durante «poco más de 30 minutos», donde ambos mandatarios «analizaron los datos epidemiológicos» de la Ciudad.
