El fiscal federal Jorge Di Lello rechazó que deba investigarse en los Tribunales de Comodoro Py la denuncia de Darío Nieto, secretario privado de Mauricio Macri, sobre la supuesta manipulación de su teléfono celular, que había sido secuestrado en un allanamiento en el marco de la investigación por presunto espionaje ilegal.
La medida del integrante del Ministerio Público fue tomada ante un pedido del ex funcionario nacional, quien aseguró que fue víctima de la manipulación, violación de la cadena de custodia de su celular y que incluso filtraron información a la prensa.
Nieto pidió que se proteja la información que está en su celular en función de que está vinculada a la «marcha gubernamental» en los cuatro años que trabajó como secretario de Macri y también afirmó que en su teléfono no hay información que pueda servir para la causa de espionaje por la cual había sido allanado.
En ese sentido, el allegado al líder del PRO dijo que la Justicia de Lomas de Zamora ordenó un trabajo de copiado y extracción de la información, así como peritajes de la Policía Federal y Gendarmería Nacional.
Además, el secretario privado del ex mandatario se quejó de que algunos mensajes de texto se filtraron en la prensa entre ellos uno supuestamente enviado a la ex subdirectora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Silvia Majdalani, aunque señaló que desconoce haberlo escrito.
A raíz de la denuncia, el fiscal Di Lello consideró que los hechos habrían tenido lugar mientras el celular estaba bajo cautela del Juzgado Federal de Lomas de Zamora y por eso debe ser allí donde tiene que cursar la acusación de Nieto.